Que
todo vuelve y la vida es una cadena: de favores, de errores, de aciertos, de olvidos.
Que
tengo que decir que no más seguido.
Que
tengo que pedir ayuda más seguido.
Que cuando
parece que estamos solos, hay muchos alrededor.
Que
en los peores momentos estamos solos, y son muy pocos los que están alrededor.
Que a
veces, cuando todo está perdido, aparecen esas personas inesperadas.
Que hay gente nefasta. Gente que no.
Que quienes estuvieron este año son pocos, valiosos y merecen todo mi respeto.
Que quienes estuvieron este año son pocos, valiosos y merecen todo mi respeto.
Que
nada me importa más que: hacer el recorrido, saber adónde voy.
Que
Cerati compuso un par de temas zarpados.
Que
la distancia entre emisión y recepción puede ser un abismo.
Que
la verdulería tiene delivery.
Que
puedo vivir comiendo la misma comida todos los días.
Que
no puedo vivir sin: viajar, volar, bailar, saltar, soltar.
Que
la energía psíquica (también) tiene un límite.
Que
tengo más energía de la energía que creo que tengo.
Que
hay que defender la alegría, siempre.
Que
el tiempo es una medida relativa.
Que
nunca voy a dejar de aprender.
Que poner el
punto final puede ser de las cosas más angustiantes, o de las mejores que
suceden en la vida.